En el mundo de la Academia casi todo mundo tiene poderes conocidos como “Quirks”. Normalmente, los ciudadanos no pueden usar sus Quirks a la luz del día, ya que es un privilegio reservado por ley solo para los superhéroes que estén registrados.

Sin embargo, unos pocos tercos han optado por rechazar esta regla. Se les conoce como vigilantes: personas con corazones de héroes, pero con la reputación de villanos.

Kouichi Haimawari, de 19 años, siempre soñó con ser un héroe, pero no creía que tuviera un Quirk lo suficientemente bueno. En su lugar, pasaba su tiempo libre deambulando por la ciudad haciendo buenas y simples acciones, como recoger la basura o ayudar a los niños perdidos a encontrar a sus padres. Satisfecho con su suerte en la vida, Kouichi nunca esperó ser arrojado al mundo de los héroes, pero su vida cambia para siempre por un inesperado encuentro con Knuckle Duster, un vigilante, un héroe ilegal.